El uso inteligente de los promotores del crecimiento puede aumentar las utilidades Dr. Fernando Vargas
El uso correcto de los antibióticos promotores del crecimiento puede ayudar a las integraciones a incrementar significativamente el retorno sobre su inversión, dijo el Dr. Fernando Vargas, gerente técnico de aves de Intervet/Schering-Plough Animal Health. El Dr. Vargas invitó a las integraciones a entender los aspectos básicos del funcionamiento de estos antibióticos promotores del crecimiento (APC) para que puedan hacer mejor uso de ellos. La protección de la integridad intestinal es de importancia crítica, pues si se pierde se producirá un desperdicio de alimento y éste es el componente más costoso de la producción de aves. “El mejor uso del alimento depende de mantener la capacidad de las aves de absorber los nutrimentos”, dijo, y también es esencial utilizar ingredientes de buena calidad. La forma, la función y la microflora del intestino desempeñan un papel importante Cada segmento del tracto gastrointestinal tiene características únicas con respecto a su forma y su función, dijo el Dr. Vargas. Sus niveles de pH (grado de acidez) también son variables por lo que cada segmento alberga diferentes tipos de bacterias. La parte anterior o proximal del tracto gastrointestinal tiene un pH más bajo en el cual viven mejor los lactobacilos, coliformes y Streptococcus spp. En la porción distal, donde la acidez es menor, existen varios tipos de Clostridium y otros microorganismos, explicó. El Dr. Vargas dijo que está muy difundida la idea equivocada de que todas las especies de Clostridium son nocivas, pero algunas de las que viven en el ciego son completamente inofensivas y, de hecho, desempeñan un papel importante para mantener el balance adecuado de la microflora. Sin embargo, las cepas patógenas de Clostridium pueden causar inflamación de la pared intestinal produciendo clostridiosis, que puede conducir a enteritis necrótica, uno de los principales desafíos a que se enfrentan los pollos de engorde, según indicó el doctor. La clostridiosis se puede presentar desde tan sólo 2 semanas de edad, aunque el riesgo continúa hasta la 7a. semana de vida. Los brotes de esta enfermedad suelen estar relacionados con coccidiosis mal controlada o bien con alimento de mala calidad, pues cualquiera de estos dos problemas puede causar inflamación del intestino. Los brotes tardíos también pueden ser causados por supresión o deficiencia de la respuesta inmune. Cuando existe presencia de inflamación –ya sea por alimento de mala calidad o por coccidiosis– los nutrimentos no se absorben en la porción anterior del intestino, por lo que llegan hasta secciones distales de este órgano donde son digeridos por bacterias anaerobias, que no siempre son de los tipos habituales. Esta situación produce el crecimiento exagerado de dichos tipos de bacterias, causando un desbalance de la microflora natural. Debido a la manera como los pollos digieren el alimento, es posible que una mezcla potencialmente dañina de bacterias emigre a otras partes del intestino, dijo el Dr. Vargas. El resultado de este proceso es la clostridiosis, que con frecuencia causa enteritis necrótica (véase la Figura 1). Herramientas efectivas para el control Los antibióticos promotores del crecimiento son una opción efectiva de manejo para controlar las pérdidas debidas a este tipo de inflamación intestinal, continuó diciendo el experto. Citó los resultados de varios estudios que demuestran que la presencia de estos antibióticos en la ración se asocia con una ganancia de peso adicional del 3.5% durante la vida de las aves. Estos productos también brindan resultados favorables en la conversión alimenticia. Otro beneficio que obtienen los productores que utilizan promotores del crecimiento es mayor uniformidad en las parvadas, lo que simplifica su manejo, procesamiento y comercialización, dijo. No obstante, estos compuestos tienen diferentes mecanismos de acción dependiendo de su estructura molecular y de otras características, señaló. El antibiótico promotor del crecimiento Enradin (enramicina) actúa inhibiendo a las enzimas que utiliza Clostridium para penetrar en la pared del intestino. Este atributo, que se debe a la manera como la enramicina se une a los microorganismos, es único entre los promotores del crecimiento, dijo el Dr. Vargas. El mismo modo de acción hace menos probable que las aves desarrollen resistencia a la enramicina, lo que representa una ventaja significativa sobre los demás promotores, aclaró. La enramicina también actúa exclusivamente sobre Clostridium, por lo que es menos probable que interfiera con otros tipos de bacterias del intestino, incluyendo a las que contienen los productos de exclusión competitiva, como los que se utilizan para el control de Salmonella. “La enramicina es sumamente específica contra Clostridium y esto verdaderamente es una ventaja significativa”, concluyó. Back to Latino América Edición (#6) |